(Capriglia Irpina, 28/junio/1476 – Roma, 18/agosto/1559) fue el papa 223º de la Iglesia católica y 131º soberano de los Estados Pontificios. Siendo todavía obispo, en cuanto conoció el proyecto de vida religiosa de san Cayetano, se apresuró a ir a su encuentro, echarse a sus pies y pedirle que le admitiera como compañero.